El otro día vimos a una planta pasear por la calle. Iba atravesando Callao con su maceta y sus hojas al viento. No, no es una figura retórica. Ocurrió de verdad, como tantas cosas increíbles que sucede en la ciudad y en el mundo. Una vez que habéis asumido el hecho, sé que estáis pensando que andar por plena ciudad es algo inseguro para una planta; con tantos coches, con tanta gente que pueden lastimar sus ramas, esa maceta de terracota tan sensible a los golpes. Con todo, ella estaba decidida y cruzaba la plaza madrileña con una zancada portentosa. Decidida. Envidiable.
Me hizo pensar que hay muchas elecciones en nuestra vida, de hecho, según algunos, hay demasiadas. Pero hay algo que no podemos no elegir: tener problemas.
Seas una planta de balcón, de jardín, salvaje o andarina, habrá problemas. Sin embargo, si que hay elección posible: elegir los problemas que te quieres enfrentar. Hay otros que no podrás elegir, aunque desearías poder tener capacidad para hacerlo: ciertas enfermedades, una perdida importante, algunas circunstancias sociopolíticas (aunque la agrupación social frente a las injusticias y tener conciencia socio-medioambiental algo puede hacer).
Sin embargo, muchas más de lo que parece sí que están en nuestro radio de decisión y acción. Pero ¿cómo decidir que problemas quieres?
Los que te impulsen y los que te gustaría resolver.
Y una vez inmersos en los problemas, ¿qué se hace?
Recordar el motivo por el que los has elegidos y, sobre todo, algo obvio, pero no tanto: los problemas no tienen que dejarte indefenso/a/e ya que pueden convertirte en un buscador de soluciones. Cambia mucho pasar de pensar «estoy padeciendo un problema» a «estoy resolviendo uno».Intento aplicarme eso de elegir un problema que me haga salir a la plaza y andar sin temor a que se me rompa la maceta.
Esto de la capacidad de decisión me recuerda al post que he escrito esta semana. En verdad es un maxiguía de una de las cosas que más me interesan: los espacios de trabajo/estudio. Creo que estos pueden impulsar nuestro estado de flow. Cada vez me considero más materialista, en un sentido de la palabra que ya os explicaré, pero adelanto que está muy alejado del consumismo. De hecho, está más relacionado con el cuidado de nuestros ambientes y de los materiales que nos rodean.
Disfrútalo porque da muchas ideas respecto a como confeccionar un buen espacio de trabajo dependiendo de muchas variables.
MÚSICA
Todo cambio implica algo de coraje, y aquí Sia lo canta.
FOTO
UNA FRASE DE OTROS
«Hasta que no hagas consciente a tu inconsciente este gobernará tu vida y lo seguirás llamando destino» Jung.
UNA PREGUNTA PARA TÍ
¿Cómo te gustaría que tu yo dentro de treinta años recordará el que eres ahora?
—-
Muchas gracias por llegar hasta aquí. Si quieres comentarme cuál es tu libro favorito y con cuál vas a pasar este día, escríbeme.
Cuídate,
Fernando
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